Bajo el infinito cielo de Escocia by Helena Pinén

autor:Helena Pinén [Pinén, Helena]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Romántico, Histórico
editor: ePubLibre
publicado: 2023-09-25T00:00:00+00:00

14

Nessie había imaginado cientos de veces el reencuentro con Thane. Cuando miraba hacia la entrada principal desde la puerta de la casa, fantaseaba con echar a correr hacia él y lanzarse a sus brazos. No obstante, no pudo moverse por la impresión de verle allí, por fin. Thane azuzó al caballo y se detuvo frente a Nessie para bajar de un salto, sin siquiera asegurarse de que el animal se hubiera parado del todo.

Había cambiado desde la última vez que lo había visto. Era innegable que el paso del tiempo había hecho mella en él.

Tenía una espesa barba pelirroja cubriendo su rostro, mas se apreciaba que había perdido peso en las hendiduras de sus mejillas y en la rojez de sus ojos. Su pelo estaba sucio, graso y húmedo. La ropa no tenía mejor aspecto, y el olor que desprendía el soldado era peor que cuando estaba en el campamento. Sin embargo, a Nessie no le importó en absoluto que estuviera hecho un desastre.

Porque era Thane.

Su marido se acercó a ella con los ojos muy abiertos, como si creyera que era un fantasma.

No era el único que tenía esa sensación, ciertamente. A la muchacha le costaba asimilar que el hombre que tenía ante sí era Thane. A quien tanto amaba, aquel que había sido rey de fugitivos hasta que su hermano gemelo pidió su indulto. Pero no había duda de que era él y de que estaba allí.

Su corazón apenas bombeaba y sus pulmones casi no almacenaban aire. Cuando él alargó la mano para tocarla y se posó sobre su mejilla, Nessie notó cómo cientos de explosiones se producían en sus músculos y los debilitaban. Temió desvanecerse. Se encontró sonriéndole de vuelta y con los ojos anegados de lágrimas.

—Thane.

—Mo bhana-phrionnsa…

No pudo contener un sollozo cuando aquel apodo cariñoso llegó hasta ella. Ese sobrenombre no era obra de ningún sueño, no estaba imaginándolo. Thane estaba a pocos centímetros de ella y estaba llamándola como siempre había hecho.

Mo bhana-phrionnsa.

Thane la abrazó. Estar de nuevo entre sus brazos fue como resguardarse frente a la chimenea en plena nevada. No había descripción posible que diera sentido a la calidez que dilató y expandió su pecho hasta liberarla de toda la carga que hubiera llevado encima durante meses, desde que se fue del campamento.

Él se apartó de Nessie casi al instante, privándola de su calor. Aturdida, buscó sus ojos en un intento de entender qué había provocado que el abrazo fuera tan corto.

La mirada azul de Thane estaba fija en su abdomen. Aunque los vestidos estaban preparados para esconder la barriga de embarazo hasta que estuviera bastante adelantado, era obvio que Nessie estaba encinta. Y Thane se había percatado al apretarla contra su cuerpo. No era algo que pudiera obviarse cuando estaban el uno contra el otro.

La mano del hombre se posó sobre la tela y la apretó para cerciorarse de que debajo había piel.

La mujer temió que Thane no estuviera contento con la situación, aunque fuera por enterarse tan tarde. Notó un nudo en la garganta, atorado justo en el centro, impidiéndole tragar o hablar.

descargar

Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.